Polvorientas lágrimas ancladas sobre el destino,
sin valor resurgente.
Rumiando perlas como follajes del día,
aquieto la noche.
Almidonada presencia de un pasado acallado,
en ojos de Venecia enmascarada,
portal de otro mundo.
Ruido alborozado de voz vacía,
que envuelve los ecos de un abismo sinfín.
Inmovilidad pasajera en espera
a un no sé qué,
te traes,... mundo!
Luz
(Poema encontrado a la orilla de un canal, en Venecia, en marzo de 2011)
Fotografías de O.Magrini
2 comentarios:
Preciosa Venecia, si tengo la oportunidad vuelvo. Es una ciudad para perderse en ella. Eso si, con un paragüitas que hya muchas palomas y ya se sabe lo que hacen jejeje.
Es verdad Nuria hay que cuidarse de las aves (y llevar el paraguas!!) , pero el encanto de la ciudad te hace olvidar las palamos y la disfrutas mucho.
Gracias por comentar!!
Omar
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